Graffiteros hacen de las suyas en el Centro Histórico

Aguascalientes, Ags.- Completamente desatados se encuentran los vándalos del aerosol en el Centro Histórico de la capital, ya que varias de las fincas de la zona, han estado amanecido pintarrajeadas en el transcurso de la semana, incluyendo la fachada de la Casa Cultura, la Catedral y los recientemente rehabilitados locales comerciales de la calle Galeana.
Mientras los gobiernos estatal y municipal destinan inversiones de importante cuantía -con los impuestos que pagan los ciudadanos, cabe señalar- con la finalidad de mejorar la estética del primer cuadro citadino, los graffiteros se han dado a la tarea de arruinar todo este trabajo al plasmar sus molestas grafías en cuanta pared han tenido a su alcance y con la complacencia de los elementos policiacios que no han hecho por identificar a los responsables de esta desgracia. 
Actualmente, es posible observar rayones en algunas de las fachadas de Galeana a las que apenas hace unos meses, se les proporcionó una “manita de gato” en el marco de la remodelación general de la calle, obra que fue llevada a cabo por el gobierno de la entidad y financiada con los recursos del erario público.
Del mismo modo, en la parte trasera de la Catedral Basílica, se puede observar una enorme e ilegible pinta elaborada con pintura negra que finaliza con un signo de pesos; así como rayones de menor tamaño plasmados en los laterales del templo, que se encuentran hechos de cantera, material del que es difícil limpiar sin dejar rastro. 
A principios de esta semana, apareció la leyenda “Graffiti es moda?” sobre el frente del Instituto Cultural de Aguascalientes, firmado con las mismas iniciales plasmadas en otros muros de la primer manzana; el desperfecto fue corregido inmediatamente, sin embargo siguen apareciendo inscripciones similares en calles como Nieto y Venustiano Carranza, en las que las paredes tampoco se han salvado de esta odiosa plaga de contaminación visual, que dista mucho de los murales multicoloridos que en otras partes de la capital han sido ejecutados por verdaderos artistas del aerosol.