Nuevamente aparecen daños por este tipo de expresión en la infraestructura de inmuebles históricos religiosos en el primer cuadro de la ciudad los cuales cuentan con un valor histórico invaluable, en esta ocasión se manifestaron en la fachada del Santuario edificación religiosa ubicada en la calle Venustiano Carranza enfrente de las oficinas del Obispado de Aguascalientes.
Este tipo de expresión tiene sus inicios en los años 80s en el país vecino del norte y en el apogeo de estas acciones fueron perjudicados bastantes lugares históricos en esta nación, por lo que se tomaron medidas determinantes para la disminución del conflicto prohibiendo la venta de aerosoles, este tipo de medidas debería ser adoptada en nuestro país así lo expresó el Dr. Alberto Ramírez, Delegado Federal del Centro INAH en Aguascalientes.
“El graffiti es un problema nacional que ya se lleva presentando varias décadas,Aguascalientes es uno de los centros históricos que menos afectaciones tienen, los más afectados por este tipo de acciones se presentan en estados del norte del país y un claro ejemplo es Durango, para lograr una evolución se debe de contar con una forma colegiada en la que participen gobiernos y sociedad, ante este problema Estados Unidos prohibió la venta de aerosoles y disminuyó bastante el conflicto, nosotros vamos a contar con una reunión con el Ayuntamiento para tratar de tener un registro de control y de preferencia realizar la venta a personas mayores de edad”, dijo Ramírez Ramírez.
Otra medida que se realizará para combatir este problema será la impartición de pláticas mensuales dentro de las instalaciones del INAH, con el propósito de conocer el valor cultural de parroquias, templos, catedral, centros arqueológicos y con ello evitar este crimen al patrimonio de la sociedad.
La autoridad competente hizo énfasis en la denuncia ciudadana ante estos actos de vandalismo ya que cualquier persona puede realizarla, con la finalidad de seguir con un proceso de investigación legal que le compete por ser un delito federal a la Procuraduría General de la Republica PGR y con ello se busca dar justicia ante el daño patrimonial.
El monitoreo del INAH en el estado es de manera permanente y la última actuación fue por la afectación severa en una edificación que data del siglo XIX en la calle José María Chávez nuevamente en el centro de la ciudad, los daños han sido calificados como severos y el propietario ya está en audiencia, en la cual se llegó al acuerdo para la presentación de un proyecto de restauración por lo pronto ya fueron detenidas las obras y se han colocado sellos de suspensión en esta propiedad.
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