A pesar de ser de las zonas con mayor vigilancia, el centro histórico y el primer cuadro son dos de los sitios que presentan mayor daño por graffiti.
Identificados como dos de los lugares más atractivos para el turismo, hoy en día lucen sucios a raíz del sinfín de pintas que presentan en la mayoría de sus muros.
A decir por transeúntes y locatarios de la zona, el graffiti es un problema creciente que afecta en gran medida a la ciudad, ya que muchos de los “rayones“ fueron realizados en sitios catalogados como de gran importancia histórica para la localidad, por ejemplo, los arcos en el jardín principal.
Locatarios de la explanada del templo de San Francisco mencionaron que “debe de hacerse un programa integral para tratar este problema, hubo hace tiempo un programa para pintar el centro pero ya está muy sucio por los graffitis otra vez, creo que el tratar de solucionar esto es para beneficio de todos”, concluyeron.
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